¡No permitas que la gripa te alcance! Conoce a la mejor fruta para combatir resfriados de la temporada.
La gripa o (gripe) es uno de los padecimientos más comunes en el mundo moderno, aunque al inicio de su aparición en nuestra civilización, una simple gripe le quitó la vida a millones de personas, pues se trataba de un nuevo padecimiento que el cuerpo todavía desconocía. Si bien la naranja suele ser el alimento más citado cuando se trata de vitamina C, no es la única fruta que aporta una mayor cantidad de ácido ascórbico.
Para combatir enfermedades relacionadas con el sistema respiratorio, resfriados y gripe, hay otras frutas como la guayaba (273 mg por cada 100 gr.), la grosella negra (160 mg) y vegetales como los pimientos rojos (152), o el brócoli que aportan el triple de vitamina C más que las mandarinas, limones y las naranjas. Esto de acuerdo a la Base de Datos Española de Composición de Alimentos (Bedca).
El nutriente Vitamina C es el que ayuda a potenciar los mecanismos de defensa del organismo. Es cierto que los cítricos son los primeros que llegan a nuestra mente cuando llega la época de resfriados y de gripe, pero hoy sabrás por qué la guayaba es todavía tres veces mejor que la naranja para aliviar gripes y resfriados.
La cantidad diaria de vitamina C que recomienda la OMS es de 75 mg/día (mujeres) y de 90 mg/ día (hombres). Lo ideal para alcanzar ese rango para así evitar contraer alguna gripe o resfriado, según propone Iñaki Elío, director académico del Grado de Nutrición de la Universidad Europea del Atlántico. Y la mejor manera de hacerlo es a través de una alimentación equilibrada en la que incluyamos los cítricos pero también otros vegetales de temporada que son ricos en ácido ascórbico como las crucíferas como brócoli, coles de Bruselas, col y coliflor), así como la guayaba. Y otros también que en realidad, pueden encontrarse en el supermercado durante casi todo el año como el pimiento rojo, el perejil fresco, el kiwi y el berro.
La vitamina C contribuye a potenciar el sistema inmunológico, mejora la absorción del hierro, contribuye a la síntesis del colágeno y destaca por su capacidad antioxidante. Su consumo debe ser medianamente moderado, pues en el caso de este nutriente el Profesor Elio nos dice que al ser una vitamina hidrosoluble, su exceso no se acumula en el cuerpo, sino que se elimina por la orina en forma de oxalato, lo que da lugar a que unas dosis demasiado elevadas de vitamina C puedan ser causantes a medio plazo de cálculos renales de oxalato cálcico.
CÓMO SE CONSERVA LA VITAMINA C DE LOS ALIMENTOS
Para aprovechar al máximo la cantidad de Vitamina C que contienen frutas y verduras, se aconseja consumir los vegetales en crudo y al momento, es decir, en cuanto las pelamos y cortamos, ya que la vitamina C se oxida con la exposición al oxígeno, según revela Ana Amengual, dietista-nutricionista del Centro Julia Farré.
A la hora de cocinar la técnica culinaria que más protege la vitamina C es la cocción corta sin exceso de agua. «La cocción al microondas, rápida y sin remojo, hace que se pierda un 45% menos de vitamina C que si se hierven los vegetales», precisa Amengual. Las preparaciones al vapor también son una opción. Puede ser en wok, al horno, en guiso y hervido.
La experta Ana Amengual añade un dato curioso que puede hacer cambiar de opinión a aquellas personas que creen que la mejor y única manera de conservar la vitamina en verduras es consumiéndolas en crudo; informando que al cocinar los alimentos, también se logran conservar muchos de los nutrientes.
«Al cocinar los vegetales tal vez perdamos parte de la vitamina C, pero también logramos una mayor cantidad de nutrientes como el licopeno, los betacarotenos y el ácido fólico, por lo que no es necesario obsesionarse tampoco con el consumo de los las verduras en crudo». En cuanto a la conservación, lo ideal es guardar los alimentos en un lugar fresco, seco, alejado de la luz solar y con espacio suficiente.