Aún en pleno siglo XXI a algunas mujeres nos cuesta creer que somos libres de disfrutar en el campo sexual. Más todavía, que tenemos el derecho de tener orgasmos y proponerlo a la pareja. Y ahora que el Día de Reyes se aproxima, es buen momento para pedir en nuestra carta un regalo HOT que nos permita conocer más nuestra sexualidad: ¡sí, un juguete sexual!
¿Por qué un juguete sexual no es tan mala opción?
Además de divertir, los juguetes sexuales pueden tener un uso médico. Algunos pueden tratar problemas como la disfunción eréctil, trastorno excitación genital, trastorno del deseo sexual hipoactivo y la disfunción orgásmica”, describe la Planned Parenthood Federation of America.
Por otro lado, dar un lindo detalle es fabuloso, nos hace sentir plenos, contentos y demuestra el amor y la importancia que le tienes a una persona, la que también se sentirá elogiada.
¿Cuál juguete sexual escoger?
La venta de juguetes sexuales va en aumento. Comparado con años anteriores Cesar Castro, sexólogo del laboratorio del amor Erectus. Nos cuenta que las ventas han crecido un 80 % comparado con años anteriores. Las parejas se animan a más, son más abiertas, preguntan, experimentan, indagan y aprenden.
Existe una gran oferta en el mercado, para primerizas, quienes se animan a más, parejas aventureras y a distancia. La gama es tan amplia en colores, texturas, funciones como en precios. Existen juguetes de $200 a 14.000 mil pesos.
Sin embargo, a la hora de adquirir uno debes de fijarte que cuente con lo siguiente:
Debe estar elaborado con silicona, plástico, metal y vidrio resistente a los golpes
Que puedas sumergir en el agua para poder limpiar correctamente
Si es recargable o utiliza bacterias que todo se encuentre en perfecto estado
Utilizar lubricante a base de agua