La comunicación y el diálogo son fundamentales en las relaciones de pareja, especialmente al abordar temas relacionados con la sexualidad, como proponer juegos eróticos para salir de la rutina o explorar fantasías sexuales, como tener sexo en un lugar público, realizar juegos de rol o hacer un trío. Sonia García, psicóloga y sexóloga clínica, explica que cuando se tiene curiosidad por nuevas prácticas sexuales, es crucial comunicarlo de manera asertiva, siempre desde el respeto y reconociendo que la pareja tiene derecho a rechazar la idea.
En la misma línea, Olga Fernández-Velilla Lapuerta, psicóloga General Sanitaria y especialista en Terapia Familiar del Instituto Psicológico Cláritas, aconseja mantener una comunicación abierta y respetuosa sobre el sexo, en especial al considerar nuevas prácticas. Es esencial expresar lo que nos gusta o no, buscando soluciones y tratando el tema con tacto para no herir los sentimientos del otro. Además, es importante elegir un momento adecuado y tener tiempo para hablar de estos temas de manera cómoda para ambos.
Sin embargo, proponer novedades en el ámbito sexual puede generar miedo o vergüenza, ya que uno puede pensar que el otro no comparte los mismos intereses. Esto puede llevar a no disfrutar plenamente de la relación sexual. Fernández-Velilla destaca la importancia de plantear nuevas ideas que resulten atractivas, ya que a veces no se aborda el tema por temor a ofender o ser juzgado.
Una de las fantasías más comunes y difíciles de plantear es la idea de hacer un trío. García sugiere presentar este tema como un deseo de realizar una fantasía, enfatizando lo estimulante que puede ser, sin imponerlo ni amenazar con dejar la relación. Fernández-Velilla coincide en que cualquier decisión sobre un trío debe ser consensuada y clara para evitar conflictos.
Normas para un trío con tu pareja
Las expertas coinciden en que no hay normas universales para las parejas que quieren experimentar sexualmente con una tercera persona, pero es recomendable establecer límites personalizados. García señala que cuanto más concretas sean estas normas, menos malentendidos habrá, y es vital que ambas partes las cumplan.
Fernández-Velilla enfatiza que es esencial llegar a un acuerdo en los límites y normas, asegurando que ambos se sientan cómodos. También resalta la importancia de tener una relación sana basada en la confianza, ya que la falta de ella puede dar lugar a celos e inseguridades.
Por otro lado, pueden surgir problemas si hay curiosidad por incluir a terceros en la relación y no se plantea adecuadamente, o si la fantasía no es compartida. En ambos casos, la comunicación respetuosa y la elección del momento adecuado son clave, así como escuchar a la pareja y acordar los límites.
De un trío a una relación abierta
Realizar un trío para satisfacer una fantasía sexual es diferente de establecer una relación abierta, que implica un cambio en la dinámica de la relación. Para abordar este tema, García sugiere sondear la opinión de la pareja sobre las relaciones abiertas antes de hacer una propuesta. Si la otra persona se muestra reticente, es importante considerar si vale la pena avanzar con la idea. Si la pareja está abierta a cambiar, se debe comunicar el tema con respeto y negociar las normas para facilitar el proceso.
Fernández-Velilla también destaca que al considerar pasar de una relación monótona a una abierta, es esencial plantear la idea desde el respeto, teniendo en cuenta las necesidades del otro. Aunque la conversación puede ser complicada, es crucial que ambos reflexionen sobre qué tipo de relación desean. Si ambos están de acuerdo en tener una relación abierta, eso es positivo; si no, deberán evaluar si pueden llegar a un acuerdo que no cause daño a ninguno de los miembros, o si la relación puede continuar.