Los medicamentos para la hipertensión arterial son esenciales para controlar esta enfermedad silenciosa que afecta a millones de personas en todo el mundo. Sin embargo, algunos de ellos pueden tener efectos secundarios en la función sexual.
¿Qué medicamentos afectan más el deseo sexual?
Manuel Anguita, portavoz de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), explica que casi todos los fármacos hipotensores pueden provocar disfunción eréctil y una disminución de la libido en mujeres, aunque no en todos los casos ni con la misma intensidad.
Los medicamentos que más impacto pueden tener en la vida sexual son:
🔹 Betabloqueantes: bloquean los receptores de catecolamina, lo que puede causar fatiga, reducción de la actividad vital y disminución del deseo sexual. Por esta razón, ya no se consideran una primera opción en el tratamiento de la hipertensión.
🔹 Diuréticos: aunque pueden afectar la libido, en el tratamiento de la hipertensión suelen usarse en dosis bajas, por lo que el impacto es mínimo.
El resto de los medicamentos para la presión arterial alta tienen un riesgo bajo de causar disfunción sexual.
¿Qué hacer si un medicamento afecta la libido?
Si se detecta que la medicación está afectando el deseo sexual, existen dos alternativas:
✅ Reducir la dosis, si el control de la presión arterial lo permite.
✅ Cambiar de medicamento, en caso de que el problema persista.
¿La hipertensión en sí misma afecta el deseo sexual?
Más allá de los medicamentos, la hipertensión no controlada puede afectar la circulación sanguínea y reducir el flujo de sangre a los órganos sexuales, disminuyendo el deseo y el rendimiento. Además, puede aumentar el riesgo de problemas cardiovasculares graves como ictus e insuficiencia cardíaca.
Cómo controlar la tensión arterial en casa
Para un buen manejo de la hipertensión, es fundamental medirse la presión arterial de manera adecuada:
📌 Postura correcta: sentado o acostado, con el antebrazo a la altura del corazón.
📌 Reposo previo: esperar unos minutos antes de la medición.
📌 Frecuencia: al inicio del tratamiento, dos veces al día (mañana y noche). Una vez estabilizada, basta con una medición mensual.
Controlar la presión arterial no solo mejora la salud general, sino que también puede ayudar a mantener una vida sexual satisfactoria.
