Uno de cada tres adultos experimenta síntomas digestivos de forma recurrente, y aunque muchas veces se relacionan con malos hábitos de vida, en otros casos pueden ser el reflejo de enfermedades serias que requieren atención médica. Así lo advierten especialistas como el cirujano digestivo Antonio Barrasa y el doctor Óscar Murcia, del grupo hospitalario Vithas en España.
Según Barrasa, la enfermedad por reflujo gastroesofágico encabeza la lista de trastornos digestivos, afectando a cerca del 30% de la población adulta en países occidentales. Le siguen afecciones como el estreñimiento crónico, el síndrome del intestino irritable y la dispepsia funcional.
Pero los especialistas también alertan sobre otras patologías más graves que pueden esconderse tras molestias aparentemente comunes, como el cáncer colorrectal, la enfermedad hepática por grasa no alcohólica o la litiasis biliar, que es más frecuente en mujeres.
Síntomas digestivos funcionales: cuándo preocuparse menos
En muchos casos, los malestares son intermitentes y están relacionados con el estrés, una alimentación deficiente o hábitos poco saludables. Estos son algunos signos de alerta funcional, que en principio no indican gravedad:
- Hinchazón abdominal
- Pesadez después de comer
- Exceso de gases
- Distensión del abdomen
- Alternancia entre diarrea y estreñimiento
Cuando estos síntomas son esporádicos, han estado presentes por mucho tiempo y no se agravan, es probable que su origen sea benigno, según apunta el doctor Murcia.
Señales de alerta de una posible afección grave
Sin embargo, hay síntomas que requieren atención médica inmediata, sobre todo si van acompañados de pérdida de peso no explicada o disminución del apetito. Estos son algunos de los más importantes:
- Dolor abdominal persistente
- Vómitos frecuentes o con sangre (hematemesis)
- Sangre en las heces o rectorragia
- Diarrea o estreñimiento prolongados
- Anemia sin causa aparente
- Imposibilidad de defecar junto a hinchazón y náuseas
En estos casos, los expertos recomiendan acudir a urgencias o consultar con un especialista para descartar condiciones como oclusión intestinal o enfermedades oncológicas.
Claves para prevenir los problemas digestivos
El primer paso para evitar complicaciones digestivas es adoptar hábitos de vida saludables. El doctor Murcia recomienda:
- Consumir frutas, verduras, legumbres y pescado con frecuencia
- Beber al menos dos litros de agua al día
- Dormir bien y evitar el estrés crónico
- Realizar ejercicio físico con regularidad
- Evitar el exceso de carnes rojas, harinas refinadas, alcohol y tabaco
Mantener una buena salud digestiva depende en gran medida de nuestras decisiones diarias. Escuchar al cuerpo, reconocer los signos de alerta y actuar a tiempo puede hacer la diferencia.