Luego de dominar la gran pantalla durante años, Kate Hudson decidió explorar otra de sus pasiones y lanzó su primer álbum de música.
Conocida en todo el mundo por sus papeles en películas como “Casi famosos” y “Cómo perder a un chico en 10 días”, Kate Hudson sorprendió a la industria del entretenimiento al aventurarse en la música a los 45 años.
En entrevistas recientes, Hudson confesó que su deseo de cantar había sido frenado por el miedo al rechazo durante más de veinte años. Aunque intentó ingresar a la música hace tiempo, alguien en la industria le dijo que ya era “demasiado mayor” para triunfar. Sin embargo, la pandemia le ofreció una oportunidad para reflexionar y la inspiró a retomar este sueño que tenía desde joven. Esta introspección la ayudó a superar sus miedos y finalmente a realizar su primer álbum.
También hubo complicaciones emocionales relacionadas con su padre biológico, Bill Hudson, quien fue un músico exitoso en los años 70. Hudson explicó que estos factores, junto con sus problemas personales, la mantuvieron alejada de la música, a pesar de las múltiples ofertas para grabar un álbum desde que comenzó su carrera en el cine.
Hudson finalmente encontró el coraje para seguir adelante gracias a un evento benéfico en el que su amigo Tor E. Hermansen, del dúo productor Stargate, le pidió que interpretara “Firework” de Katy Perry para una recaudación de fondos escolar en Zoom. Este evento llamó la atención de Linda Perry, madre de la misma escuela, quien quedó impresionada por la voz de Hudson y la invitó a su estudio de grabación.
En esas primeras sesiones, Hudson trabajó junto a Perry y su prometido, Danny Fujikawa, quien también es músico. Fujikawa describió esta experiencia como un renacimiento de su propia carrera musical, la cual había dejado de lado por problemas personales. La química entre Hudson y Perry resultó en la creación de treinta canciones en apenas tres semanas.
El fruto de estas sesiones es el álbum “Glorious”, que presenta una colección de canciones poderosas y maduras, influenciadas por iconos del rock como Linda Ronstadt y con un sonido que recuerda a artistas como Adele y Sheryl Crow. El álbum abarca desde el rock clásico hasta el blues y el country. Según Hudson, la creación de la canción principal del disco fue extremadamente rápida, llevándoles solo diez minutos, algo que ella describe como un estado de plena presencia y gozo absoluto.
Durante las sesiones de grabación con Perry y otros colaboradores como Johan Carlsson, Hudson vivió momentos de profunda conexión y creatividad, comparables a los mejores momentos que ha experimentado en la actuación, cuando una escena se siente perfectamente sincronizada.
Aunque Hudson ha demostrado su talento y pasión por la música en películas como “Nine” y “Music”, así como en la serie “Glee”, esta faceta suya se había mantenido bastante privada. Esto es significativo, considerando que ha estado rodeada de figuras influyentes en la música, como sus ex parejas Chris Robinson y Matt Bellamy, y su actual pareja, Danny Fujikawa, quienes también han influido en el proyecto.
El lanzamiento de “Glorious” ha sido bien recibido por la crítica, destacándose entre los 10 discos más vendidos en Estados Unidos y siendo considerado una de las sorpresas más agradables del año por la revista Rolling Stone. Este éxito inicial ha sido acompañado por actuaciones en vivo, como la de The Bellwether en Los Ángeles, que marcó su debut en este formato.
A pesar de su nueva aventura musical, Hudson no planea dejar su carrera de actriz. Tiene proyectos próximos, como el thriller psicológico “Shell”, junto a Elisabeth Moss y Kaia Gerber, y una serie de comedia de Mindy Kaling para Netflix. Además, sigue desempeñando un papel importante en sus negocios de moda y nutrición, como Fabletics e Inbloom.