El pontífice recibió el alta médica del hospital Gemelli en Roma, luego de superar una compleja neumonía bilateral que lo mantuvo internado más de un mes
Ciudad del Vaticano, 24 de marzo de 2025 – El papa Francisco apareció este domingo en público por primera vez desde su hospitalización el pasado 14 de febrero, cuando fue ingresado de emergencia en el Hospital Universitario Gemelli de Roma con un cuadro crítico de neumonía bilateral. Desde un balcón del centro médico, el Santo Padre saludó en silla de ruedas a cientos de fieles que se congregaron para verlo y recibir su bendición.
«Gracias a todos», dijo el Papa de 88 años, visiblemente emocionado, antes de ser trasladado a su residencia en la Domus Santa Marta, donde continuará su recuperación durante las próximas semanas.
Francisco, que sufre una enfermedad pulmonar crónica y fue operado de un pulmón en su juventud, enfrentó uno de los momentos más delicados de su salud desde que asumió el papado en 2013. Su cuadro clínico se complicó en varias ocasiones, requiriendo ventilación mecánica no invasiva, transfusiones de sangre y fisioterapia intensiva.
Durante los primeros días de internamiento, el Papa sufrió broncoespasmos, episodios de vómitos con inhalación y acumulación de moco en los pulmones, lo que derivó en varias crisis respiratorias. Pese a la gravedad, nunca fue intubado y se mantuvo consciente durante todo el proceso, según informaron los médicos del centro.
El pasado 16 de marzo, el Vaticano compartió la primera imagen del Pontífice desde su ingreso, y pocos días después se informó que ya no requería ventilación asistida. No obstante, seguirá un tratamiento prolongado para combatir una infección fúngica pulmonar y continuará con terapia física y respiratoria.
“Necesitará rehabilitación para recuperar su fuerza y su voz, que se ha visto afectada tras semanas con oxigenación de alto flujo”, explicó el cardenal argentino Víctor Manuel ‘Tucho’ Fernández, cercano colaborador del Papa.
La doctora Rossella Russomando, presente en el Gemelli, expresó la emoción de muchos creyentes: “Es la demostración de que nuestras oraciones fueron escuchadas. Su alta es un regalo para todos”.
En su regreso a la residencia vaticana, Francisco tendrá atención médica continua y acceso a oxígeno, aunque se espera que requiera cada vez menos asistencia respiratoria a medida que sus pulmones se recuperen.
Los fieles que siguieron con preocupación su evolución celebraron su mejoría. “Pensamos que no lo lograría, pero verlo salir hoy nos llena de alegría”, dijo Mario Balsamo, dueño de una cafetería frente al hospital.
El Papa continuará su agenda de forma limitada mientras se fortalece, aunque sus médicos confían en una recuperación progresiva. Su internamiento de 38 días se convirtió en la hospitalización más larga de su pontificado y la segunda más extensa en la historia reciente del Vaticano.
Francisco, en todo momento, se mostró colaborador con el personal médico, y su buen estado de ánimo fue clave en la evolución positiva. «Estuvo preguntando durante días cuándo podía volver a casa», comentó el doctor Marco Carbone, del equipo médico que lo atendió. “Hoy, por fin, lo ha logrado”.
con información de actualidad.rt.com
