Cientos de miles de migrantes de Cuba, Venezuela, Haití y Nicaragua deberán buscar nuevas formas de permanecer en EE.UU. o enfrentarse a la deportación
El gobierno de Joe Biden anunció el viernes que no extenderá los permisos temporales otorgados a inmigrantes de Cuba, Venezuela, Haití y Nicaragua, que hasta ahora les permitían permanecer en Estados Unidos por un período de dos años. Esta decisión afectará a cientos de miles de personas que ingresaron al país bajo este programa, obligándolos a encontrar otras vías para legalizar su estatus o enfrentar la deportación.
El programa, iniciado hace casi dos años, ofrecía a los migrantes una alternativa legal para entrar en Estados Unidos, siempre que contaran con un patrocinador financiero y aprobaran verificaciones de antecedentes. Si bien se seguirán aceptando nuevos solicitantes, el gobierno ha declarado que aquellos que ya están en el país no podrán prorrogar su estancia a través de este programa.
El impacto de esta decisión varía según la nacionalidad de los migrantes. Venezolanos y haitianos podrían acogerse al Estatus de Protección Temporal, mientras que los cubanos tienen la opción de solicitar la residencia bajo la Ley de Ajuste Cubano. Sin embargo, los migrantes nicaragüenses enfrentan un panorama más complicado, ya que no tendrán una vía clara hacia la residencia legal en el país, y deberán recurrir a otras opciones como solicitar asilo.
Esta medida ha generado preocupación entre defensores de los derechos de los inmigrantes, quienes señalan que la falta de opciones para extender la estancia legal podría poner a miles de personas en situación de vulnerabilidad. En especial, los migrantes nicaragüenses, que no cuentan con un estatus especial como el TPS (Estatus de Protección Temporal), enfrentan mayores desafíos para regularizar su situación, lo que podría derivar en un aumento de solicitudes de asilo, un proceso que ya está sobrecargado.
Por otro lado, la administración Biden enfrenta presiones políticas tanto internas como externas. Mientras algunos sectores críticos consideran que el gobierno debería ser más restrictivo en sus políticas migratorias, otros argumentan que esta decisión abandona a quienes buscan una vida mejor en condiciones humanitarias. En medio de este escenario, el futuro de los programas de permisos temporales se mantiene como un tema central en el debate migratorio de Estados Unidos.
Información de nytimes.com/es
