Durante el primer concierto de la gira «Cerrando Ciclos» del Grupo Aventura en el Estadio Olímpico, una fanática vivió un momento que describió como inolvidable al compartir un beso con Romeo Santos en el escenario. Sin embargo, lo que parecía un sueño cumplido terminó teniendo serias repercusiones en su vida personal.
Miriam Cruz, a través de un emotivo mensaje en redes sociales, expresó su felicidad por haber hecho realidad un deseo que llevaba años anhelando. «No sé cómo empezar, pero quiero compartir la inmensa felicidad que siento al haber cumplido este sueño tan deseado, algo que durante años imaginé tanto despierta como dormida. Para mí, no es solo admirar al artista, sino también valorar al ser humano que es. Lo he seguido y admirado por mucho tiempo», escribió.

No obstante, este momento de euforia tuvo un alto costo personal: la separación de su matrimonio de diez años. «Debo admitir que este logro tuvo un precio muy alto: la ruptura de mi matrimonio de una década. En ese momento no pensé en las consecuencias, me dejé llevar por los nervios y la emoción sin medir cómo esto podría afectar a mi familia», confesó.
En su mensaje, Miriam concluyó con un tono de pesar y asumiendo la responsabilidad de sus acciones: «Hoy me invade una tristeza profunda al reflexionar sobre el impacto que causé, pero acepto la responsabilidad de mis actos y respeto su decisión.»
El suceso ha generado diversas reacciones en las redes sociales, donde algunos muestran empatía hacia Miriam, mientras otros cuestionan las posibles consecuencias de actuar por impulso en momentos de intensa emoción.