Este 19 de marzo, Bruce Willis celebra siete décadas de vida. Aunque su retiro de la actuación fue inevitable debido a su diagnóstico de demencia frontotemporal (FTD), su legado en Hollywood sigue más vivo que nunca.
Un actor que desafía el tiempo
Nacido en Idar-Oberstein, Alemania Occidental, en 1955, Willis creció en Nueva Jersey. Su infancia no fue sencilla, pues enfrentó problemas de tartamudez que, paradójicamente, superó a través de la actuación. Fue en el teatro escolar donde descubrió su pasión, la misma que lo llevaría a convertirse en uno de los rostros más icónicos del cine de acción.
Tras mudarse a Nueva York en 1976, trabajó en diversos empleos antes de comenzar a audicionar. Su gran oportunidad llegó en 1985 con la serie Moonlighting, donde su carisma y talento lo convirtieron en una estrella de la televisión. Sin embargo, su destino estaba en la gran pantalla.
La consagración en Hollywood
En 1988, Willis protagonizó Die Hard (Duro de matar), un filme que redefinió el género de acción y lo catapultó al estrellato. Su interpretación de John McClane lo consolidó como un actor capaz de combinar dureza con un humor irónico y cercano.
Durante las siguientes décadas, su filmografía creció con éxitos como Pulp Fiction (1994), Doce Monos (1995), El Quinto Elemento (1997), Armageddon (1998) y El Sexto Sentido (1999). Su trayectoria continuó con cintas como Unbreakable (2000), Sin City (2005) y las secuelas de Die Hard, entre muchas otras.
Con más de 100 películas y una recaudación global de aproximadamente 7.500 millones de dólares, Willis se convirtió en uno de los actores más rentables de Hollywood. Su talento fue reconocido con dos premios Emmy, un Globo de Oro y una estrella en el Paseo de la Fama.
La lucha contra una enfermedad incurable
En marzo de 2022, su familia anunció su retiro debido a la afasia, una condición que afecta la comunicación. Poco después, en 2023, se reveló su diagnóstico de demencia frontotemporal. A pesar de ello, Willis sigue rodeado del amor de su familia, incluyendo su esposa Emma Heming y su exesposa Demi Moore, quienes han enfatizado la importancia del cuidado a los pacientes y a sus cuidadores.
Sus hijas también han compartido mensajes positivos, asegurando que, aunque su condición ha avanzado, Willis sigue presente en la vida de quienes lo aman. Su esposa Emma ha subrayado que esperan avances médicos que puedan cambiar el curso de esta enfermedad.
Un legado imborrable
Bruce Willis ha demostrado que la resiliencia y el carisma trascienden la pantalla. A pesar de los desafíos, su influencia en el cine es innegable. Su legado sigue vivo en cada una de sus películas y en el corazón de sus seguidores.
Este 19 de marzo, el mundo del entretenimiento celebra a un actor que, sin importar las circunstancias, sigue siendo «dura de matar».