Fueron la primera pareja de moda del pop a principios de siglo y uno de los tándems que sentaría las bases de cómo hacer muy rentable un idilio mediático. Britney Spears y Justin Timberlake estuvieron juntos desde 1999 a 2022, cuando rompían después de unos fuertes rumores de infidelidad por parte de ella. Un ‘timing’ perfecto dado que, ese mismo año, el intérprete usaba la fama obtenida de la ruptura para promocionar su primer disco en solitario, ‘Justified’, trabajo musical que paseó por todos los platós y revistas en donde la pregunta obligada —y la más buscada por el público— involucraba a Spears. Como si este tipo de intervenciones no fueran suficientes, Timberlake lanzaba el vídeo de ‘Cry Me A River’, donde colocaba a una doble de su exnovia a quien le hacía pagar una deslealtad. El circo ya estaba montado y la intérprete de ‘Toxic’ optaba por dar la callada por respuesta. Hasta ahora.
Durante una publicación en Instagram emitida este pasado martes, la que ahora es una cantante libre —después de haberse librado de una férrea tutela de 13 años— no dudaba en decir lo que pensaba de aquel revuelo mediático que encumbró a Timberlake y dejó a Spears como la mala de la historia. Una historia que ella no ha contado todavía, pero que seguro hará en su próximo libro de memorias. Ahora, de momento, ha dado una pincelada bastante reveladora:
“Jesús me llamó anoche, ¿y sabéis lo que dijo? ‘Querida niña, tu madre se aprovechó de ti sacando un libro en el momento en el que más la necesitabas, lo hizo por fama y atención. Y tu exnovio hizo exactamente lo mismo. Se aprovechó de ti en su primer álbum afirmando que fuiste una rastrera”.

Ni rastro de la foto
Poco después de confirmar lo que muchos medios ya habían razonado después del documental ‘Framing Britney Spears’ —que Timberlake se colgó de la fama de Spears para beneficiar su carrera—, esta eliminaba la instantánea sin dejar rastro del mensaje. Posiblemente arrepentida e intentando no hacer más leña del árbol caído, pero sin saber que sus millones de seguidores ya habían recibido el recado.
Timberlake, que el año pasado le pidió perdón públicamente por haberse quedado callado y “beneficiar a un sistema que propicia la misoginia”, no ha contestado de momento a este ataque de su exnovia. En la actualidad, Spears está comprometida con Sam Asghari, con quien mantiene una relación desde hace cinco años; mientras que Timberlake está felizmente casado con Jessica Biel con quien tiene dos hijos.
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