El rapero y empresario Sean «Diddy» Combs permanecerá en prisión mientras espera su juicio por cargos de tráfico sexual, conspiración y promoción de la prostitución, después de que un juez rechazara este miércoles una apelación presentada por su equipo legal.
Nueva York (AFP) – El juez Andrew Carter ratificó una decisión anterior, considerando que la propuesta de fianza de la defensa, que incluía 50 millones de dólares respaldados por su mansión en Miami, no era suficiente debido al historial de violencia de Combs, su consumo de sustancias y el riesgo de que manipulara a los testigos.
«No fue el resultado que esperábamos», comentó Marc Agnifilo, abogado de Combs, frente al tribunal federal de Manhattan tras el fallo.
«Donde sea que esté, mantiene la misma convicción. Él cree en su inocencia», añadió Agnifilo, criticando las «condiciones inhumanas» en las que su cliente está detenido.
Combs, de 54 años, fue arrestado el lunes por la noche y acusado al día siguiente de tres delitos graves, alegando que abusó de mujeres y las forzó a participar en fiestas sexuales con drogas mediante amenazas y violencia.
Además de los cargos por tráfico sexual y conspiración, se le acusa de transportar a las víctimas entre distintos estados de EE. UU. con el objetivo de prostituirlas.
Los fiscales lo acusan de liderar una organización criminal que obligaba a estas mujeres a tener relaciones sexuales bajo amenaza de violencia, inestabilidad económica o dañar su reputación.
También conocido como Puff Daddy o P Diddy, Combs se había convertido en una figura influyente en la industria del hip-hop, produciendo a artistas como el fallecido The Notorious B.I.G.