Es bien aceptado que a partir de los 30 años, la preocupación por lucir un cutis luminoso y juvenil entra a la lista de prioridades. Aunque eso no significa que se tenga que llegar a dicha edad para empezar a cuidar de la piel, en realidad muchas lo hacemos desde una edad temprana (adolescencia) y lo realizamos a través de los consejos de la abuela, tías o mamá. ¡Muestra es la pomada de la campana!
Presente en casi todas las farmacias de México —su embace es de fácil reconocimiento, blanco con la imagen de una campana al frente— con los años se ha convertido en un artículo de belleza de primera necesidad, pero, ¿por qué?
Para empezar tiene óxido de zinc. Un emoliente protector y astríngete que se recomienda para tratar quemaduras leves, raspones, rozaduras y ardor, así lo describe la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Sin embargo, hay más y para DESCUBRIRLO te invitamos a dar CLICK a la FOTO PRINCIPAL. Te sorprenderá estos 5 ingredientes de esta pomada que promueven la RECONSTRUCIÓN celular (recetas incluidas).