Al hacer las compras pocas veces nos preguntamos cómo y dónde deberíamos colocar cada cosa dentro del refrigerador. En realidad elegimos bajo dos ideas: qué necesito y qué se me antoja. Y acomodamos de acuerdo al tamaño de la pieza sin pensar que puede influir en que se descomponga más rápido y huelan mal, volviéndose un peligro para nuestra salud.
¿Qué es la intoxicación alimentaria?
Ocurre cuando una persona ingiere un alimento contaminado con bacterias, parásitos o virus, y se puede presentar después de comer un alimento congelado o refrigerados que no se han guardado a la temperatura apropiada, describe la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Algunos de los síntomas de intoxicación son: dolor de barriga, calambres de estómago, nauseas, vómito, diarrea y fiebre.
En el primer nivel (0 a 4ºC) guarda todos los alimentos que no hayan pasado por un proceso de cocción; como pollo, pescado, carne, crustáceos o mariscos crudos. Ahí también se conservan bien los sobrantes de comida.
En el segundo nivel (2º -5º C) debes considerar guardar todo alimento procesado como salsas; así como también lácteos, por ejemplo, yogurt y cremas. Aquí también se conservan de maravilla los alimentos cocidos como verduras o pollo deshebrado.
En el tercer nivel (3º -5ºC) las carnes embutidas como salchichas, jamón, tocino. También es el mejor sitio para mantequilla, quesos, pasteles y snacks.
En el cuarto nivel (6º a -8ºC), que es hasta abajo coloca frutas, vegetales (cocinados o crudos) y hierbas frescas.
En la puerta del refri es el espacio es perfecto para guardar leche, mermelada, agua y jugo.
¿Cómo eliminar el mal olor del refrigerador? Un buen truco es mezclar una cucharada de bicarbonato de sodio en un litro de agua con el jugo de un limón. Limpia el interior con profundidad, deja la puerta abierta por unos minutos y ahora sí acomoda tus alimentos como te hemos enseñado.
