La intérprete de la serie sobre Superman ha sido acusada de tráfico sexual y obligar a realizar trabajos forzosos a sus víctimas
Por J. Castellanos
La actriz Allison Mack, conocida por su participación en la serie de televisión Smallville, ha sido detenida y acusada de delitos de explotación sexual y por haber sometido a sus víctimas a trabajos forzosos. La detención de la intérprete de 35 años llega por su implicación directa en la cúpula de la secta Nxivm, de la que formaba parte desde hacía años.
Pese a que Mack había pasado desapercibido para la industria cinematográfica tras su aparición en la serie sobre Superman, su nombre saltó a los medios a finales del año pasado, cuando comenzaron a conocerse las técnicas con las que la secta estadounidense sometía a sus seguidoras. Entre ellas, se marcaba con un herraje a las mujeres que se iniciaban en los ritos de Nxivm.
Mack era una de las cabecillas de DOS, la sociedad secreta dentro de Nxivm a la que sólo podrían pertenecer mujeres. En ella, las fieles servían como esclavas sexuales de Keith Raniere, líder de la secta, tal y como ha explicado la Fiscalía del distrito este de Nueva York.
Según la fiscalía que lleva el caso, Mack y el resto de la cúpula se encargaban de reclutar mujeres «diciéndoles que se unían a una organización solo para mujeres» y en la que el objetivo era el de empoderarlas. Raniere fue detenido el 27 de marzo en México y rápidamente deportado a Texas.
El 13 de abril, el líder de la sexta de 57 años fue presentado ante un tribunal de Nueva York, acusado de los mismos delitos que se le han imputado a Allison Mack y por los que podría tener una condena de hasta 15 años de prisión. Fuente
