Fernando Villalona, Sergio Vargas y Bonny Cepeda, en visita a Nicolás Maduro, impulsan la reanudación de vuelos entre ambos países suspendidos desde julio de 2024
Bartolo García
Caracas, Venezuela. – En un gesto que une música, diplomacia y hermandad entre pueblos, un grupo de reconocidos merengueros dominicanos se reunió con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para solicitar formalmente la reanudación de la ruta aérea entre ambos países, suspendida desde julio de 2024.
Los artistas Fernando Villalona, Sergio Vargas y Bonny Cepeda, acompañados del empresario Omar Enrique, plantearon al mandatario la importancia de restablecer la conexión aérea, no solo para el intercambio cultural y artístico, sino también para el flujo de negocios y turismo entre ambas naciones.
Durante el encuentro, los merengueros destacaron los lazos históricos de amistad entre República Dominicana y Venezuela, y cómo la suspensión de vuelos ha afectado a múltiples sectores, incluyendo el artístico, que constantemente realiza giras y espectáculos en territorio venezolano.
La reunión se dio en el contexto de un homenaje póstumo al legendario merenguero dominicano Rubby Pérez, a quien Maduro otorgó la nacionalidad venezolana de manera simbólica, reconociendo su influencia musical en la cultura de ese país. Su hija, Zulinka Pérez, recibió también la cédula de identidad y fue declarada hija de Venezuela.
El presidente Maduro, conmovido por la propuesta y el simbolismo del acto, acogió positivamente la solicitud de los artistas y prometió dar instrucciones al día siguiente para activar las gestiones necesarias que permitieran reanudar los vuelos.
La respuesta no tardó en llegar. Este domingo, el Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) de Venezuela confirmó la reanudación de los vuelos comerciales hacia República Dominicana, noticia que fue recibida con entusiasmo tanto en Caracas como en Santo Domingo.
La participación del empresario artístico Omar Enrique, productor del evento “El Merengazo” en honor a Rubby Pérez, fue clave para canalizar este acercamiento. Enrique ha sido uno de los principales promotores del merengue en Venezuela y figura influyente en la industria musical venezolana.
Para Fernando Villalona, esta reapertura representa más que un triunfo logístico: es “una forma de seguir abrazando a Venezuela con nuestra música, nuestra presencia y nuestro cariño”. En tanto, Sergio Vargas celebró la decisión como “una victoria de la hermandad caribeña”.
Bonny Cepeda, quien también ha desempeñado roles institucionales en el gobierno dominicano, recordó que “el merengue ha sido un puente cultural entre nuestros países, y ahora vuelve a ser puente de conexión humana y económica”.
El gesto de los artistas fue ampliamente difundido en medios venezolanos y dominicanos, siendo aplaudido por distintos sectores sociales que valoran la música como herramienta de diplomacia y unidad regional.
Este logro no solo facilita el trabajo de músicos y promotores, sino que también abre una vía clave para el turismo, el comercio, y el reencuentro de familias binacionales que se han visto limitadas en su movilidad desde 2024.
La acción de los artistas fue calificada por muchos como una muestra de liderazgo social y cultural, al poner sus voces y su influencia al servicio de una causa que beneficia a miles de personas más allá del escenario.
Con esta iniciativa, los merengueros dominicanos se consolidan como embajadores culturales con impacto real, demostrando que el arte puede traspasar fronteras, resolver conflictos y tender puentes que ni la política ni la burocracia logran construir por sí solas.
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